sábado, 23 de abril de 2022

Algunos libros recomendados sobre ciencia y fe

 En ocasiones me habéis preguntado sobre algunos libros que traten las relaciones entre la ciencia y la fe católica. Si bien es cierto que en algunas entradas de este blog es posible encontrar referencias a estas publicaciones, creo que es conveniente crear una entrada que unifique toda esta información que se encuentra ahora mismo un poco dispersa. La lista no pretende ni mucho menos ser completa ni exhaustiva sino, simplemente, ser un recurso para saber más sobre la relación entre ciencia y fe. En muchos casos facilito un enlace para la adquisición del libro el cual , en muchos casos, también pueden ser adquirido a través de otras plataformas de venta on-line. 

 

  • El diálogo entre ciencia y fe se ha expresado en muchas ocasiones con preguntas acerca de tres aspectos fundamentales: el origen y evolución del universo, la vida y su transformación, y el ser humano con sus atributos especiales de autoconciencia y libre albedrío. Hemos escogido 12 preguntas que nos parecen relevantes y les hemos dado una contestación que pretende contrastar el esquema científico acerca de la formación y evolución del mundo, con los relatos de las sagradas escrituras y los postulados de la fe cristiana. No se trata solamente de evidenciar la perfecta sintonía y compatibilidad entre ambas visiones del mundo, sino de ir mucho más allá. Lo que la ciencia nos cuenta enriquece y estimula la fe.
  • https://www.troa.es/libro/la-ciencia-contra-dios_1189482



  • Un total de 14 catedráticos y 12 profesores de España y América Latina, pertenecientes a trece universidades distintas y de las más diversas disciplinas, aúnan sus sólidos conocimientos y experiencias para ofrecer un texto de alto rigor académico, pero con un lenguaje asequible al ciudadano medio.
    Frente a la idea generalizada de que ciencia y fe son incompatibles, y a la confusión generada por escritores de diversas sectas protestantes norteamericanas, los autores ofrecen una lectura completamente diferente. Para ello, despojan a los conocimientos científicos de la capa ideológica con la que el materialismo los ha ido recubriendo desde el siglo XVIII. El lector podrá hacerse una idea cabal de la necesaria colaboración que ha de existir entre ciencia, razón y fe, para ensanchar el ámbito de nuestro conocimiento.
He visto que el libro se encuentra descatalogado en las principales plataformas de venta on-line. No obstante, podéis acceder al libro en formato PDF en el siguiente enlace.



  • La obra resume, en el primer capítulo, las diversas hipótesis surgidas en los últimos siglos para explicar el origen del Cosmos, con especial referencia a la teoría del Big Bang. A continuación se exponen con claridad y lenguaje sencillo los mecanismos y procesos biológicos, físicos y químicos que intervienen en la formación de rocas, plantas y animales, hasta culminar en el homo sapiens. La obra demuestra cómo la metodología de las ciencias se limita descubrir cuáles son las leyes que rigen la naturaleza visible, mientras que la teología y la religión abordan las últimas causas no visibles que explican y dan su pleno sentido al mundo. 
  • https://www.troa.es/libro/hombres-de-ciencia-hombres-de-fe_544341





  • ¿Tiene algo que decir la ciencia a la filosofía? Este libro introduce al lector en el contexto de la física contemporánea para desvelar algunas singularidades que se dan en nuestro conocimiento del universo. La existencia de estas singularidades apunta a una emergencia de auténticas novedades en la naturaleza, apelando al uso de una razón ampliada que ayude a comprender el mundo que habitamos.

    Universo singular ofrece un punto de partida necesario, enraizado en la ciencia, para renovar la reflexión filosófica sobre el cosmos.
  • https://www.troa.es/libro/universo-singular_1015753



  • El testimonio de cinco grandes sabios: Galileo Galilei, Alessandro Volta, Maria Gaetana Agnesi, Louis Pasteur y Jéròme Lejeune; cinco personajes que han marcado el devenir de la ciencia en los últimos cinco siglos. La originalidad de esta obra es conjugar las geniales aportaciones de estos científicos con su faceta humana y espiritual, un aspecto que apenas se recoge en sus biografías. 
  • https://www.troa.es/libro/ciencia-y-fe-catolica-de-galileo-a-lejeune_943006

  • “Imagine if a Martian showed up, all big ears and big nose like a child’s drawing, and he asked to be baptized. How would you react?” —Pope Francis, May, 2014
     
    Pope Francis posed that question—without insisting on an answer!—to provoke deeper reflection about inclusiveness and diversity in the Church. But it's not the first time that question has been asked.

    Brother Guy Consolmagno and Father Paul Mueller hear questions like that all the time. They’re scientists at the Vatican Observatory, the official astronomical research institute of the Catholic Church. In 
    Would You Baptize an Extraterrestrial? they explore a variety of questions at the crossroads of faith and reason: How do you reconcile the The Big Bang with Genesis? Was the Star of Bethlehem just a pious religious story or an actual description of astronomical events? What really went down between Galileo and the Catholic Church—and why do the effects of that confrontation still reverberate to this day? Will the Universe come to an end? And… could you really baptize an extraterrestrial?

    With disarming humor, Brother Guy and Father Paul explore these questions and more over the course of six days of dialogue. 
    Would You Baptize an Extraterrestrial will make you laugh, make you think, and make you reflect more deeply on science, faith, and the nature of the universe.
  • https://www.amazon.com/-/es/Guy-Consolmagno-SJ/dp/0804136955


  • La relación entre ciencia y religión -y en particular el cristianismo- necesita siempre entenderse a la luz de los avances en ambas áreas del conocimiento y la reflexión humana. Esta serie de ensayos recogidos por Peter Harrison aportan una mirada fresca y contemporánea sobre este tema.
  • https://www.amazon.es/Cuestiones-Ciencia-religi%C3%B3n-Pasado-presente/dp/8429326723



  • Pocas personas saben que la Iglesia ha representado un papel clave en la revolución que ha experimentado la ciencia a lo largo de los últimos siglos. Con este libro podrás conocer esta realidad a través de las biografías de los cinco sacerdotes científicos más sobresalientes de los siglos XVI al XX: Nicolás Copérnico, Nicolás Steno, Lazzaro Spallanzani, Gregor Mendel y Georges Lemaître.
  • https://www.amazon.es/Sacerdotes-cientificos-Cop%C3%A9rnico-Lama%C3%8Etre-Argumentos/dp/8412088840



  • El caso Galileo mantendrá siempre vivo su interés como ejemplo de controversia entre ciencia y religión, quizá por su carácter excepcional. Ignacio Sols presenta aquí una revisión del caso, basada en una selección imparcial de textos para que el lector pueda formar su propia opinión. El autor profundiza sobre las causas del proceso que condujo a la condena a Galileo. El matemático italiano no pensó que desobedecía al publicar su Diálogo. La Iglesia había exigido una demostración del movimiento de la Tierra antes de interpretar literariamente ciertos pasajes de la Escritura, y él creía haberla encontrado en las mareas. Su argumento científico no era certero, pero sí su sincero pesar de que la Iglesia estuviese prohibiendo un sistema astronómico que, tarde o temprano, todos acabarían aceptando.
  • https://www.amazon.es/proceso-Galileo-trav%C3%A9s-sus-textos/dp/8412327403

  • La teoría del big bang, la «gran explosión» que habría originado nuestro mundo, pertenece a la cultura general de nuestra época; pero pocos saben que fue propuesta inicialmente por Georges Lemaître, físico y sacerdote católico. Lemaître nos ha dejado un ejemplo de honradez intelectual, nos ha abierto el camino para comprender un poco mejor el mundo en el que vivimos: un universo inmensamente grande al que accedemos por el conocimiento de lo extremadamente pequeño, que nos lleva a superar las paradojas de la existencia de un instante físico inicial, rompiendo con la visión estática del cosmos que se tenía hasta ese momento. Y esto fue posible gracias a su sano optimismo; optimismo que tenía su origen en el Dios misterioso y a la vez real en quien depositó su fe y al que tendían sus investigaciones científicas. 
  • https://www.amazon.es/HISTORIA-DEL-COMIENZO-EDUARDO-RIAZA/dp/B00G1PD1R2




  • https://www.amazon.es/El-origen-del-hombre-filosof%C3%ADa/dp/8431325011


  • El autor explica de modo accesible cómo funciona la evolución, y argumenta que esa cadena de casualidades se ajusta muy bien a un Dios que da sentido a todo, y no a un dios artesano, como tantos cristianos todavía creen.
    La vida ha ido apareciendo, como consecuencia de mecanismos puramente naturales. ¿Qué sucede entonces con el Dios de los cristianos? ¿No era acaso un Dios creador? ¿Pueden ser compatibles ambas afirmaciones? Si nos aferramos a un dios-ingeniero-mago, es misión imposible. Pero defender la creación, según Ratzinger, no es eso: es defender únicamente que ese universo en devenir está lleno de significado, porque procede de una mente creadora. El autor explica de modo accesible cómo funciona la evolución, y argumenta que esa cadena de casualidades se ajusta muy bien a un Dios que da sentido a todo.
  • https://www.troa.es/libro/evolucion_1009217


Otros documentos y enlaces de interés.










viernes, 1 de abril de 2022

Giordano Bruno, ¿científico y mártir?

El pasado 17 de febrero se cumplieron 422 años de la muerte en la hoguera de Giordano Bruno, considerado por muchos como "mártir y héroe de la ciencia" y mostrado como uno de los principales ejemplo de la actitud contraria de la Iglesia frente al progreso científico.

Como normalmente ocurre (baste pensar en el caso Galileo), la realidad suele ser muy compleja y no se corresponde con unas pocas ideas básicas y esterotipadas. No es mi intención en esta breve entrada hacer un estudio en profundidad de la figura y trayectoria de Giordano Bruno pero sí me gustaría comentar algunos conceptos erróneos que, sin embargo, han calado en el imaginario colectivo.

1.- Giordano Bruno no fue científico. No me refiero al concepto de científico que tenemos en la actualidad sino que su perfil era incluso muy distinto a lo que se podría considerar un "científico de su época" como, por ejemplo, Galileo. Giordano Bruno no desarrolló experimentos ni aplicó lo que conocemos como método científico. Todos sus planteamientos acerca de la constitución del universo los realizó desde un plano filosófico. Por tanto, denominarlo "héroe de la ciencia" no parece el título más adecuado que se le puede otorgar. Asimismo, considerar a Giordano Bruno como uno de los padres de la ciencia moderna es, cuando menos, discutible. 

2.- Otro de los calificativos que se le suele asociar es el de mártir, es decir, una persona que sufre por defender sus ideas. Pero, ¿qué ideas llevaron a Bruno a su muerte? Errónea (y, quizás, intencionadamente) se ha transmitido el mensaje de que Giordano Bruno murió por defender sus postulados sobre el universo, la teoría copernicana o la existencia de mundos habitados alrededor de otras estrellas. Y esto es totalmente erróneo. Baste recordar que en el año de su muerte (1600) la Iglesia católica no tenía una postura oficial sobre el sistema copernicano y que incluso más tarde (1616) sigue sin estar prohibida tal y como lo prueba el hecho de que, en tal fecha, no se prohíbe sino que se insta a Galileo a enseñarla como hipótesis matemática y no como verdad comprobada [1].

En su condena pesaron mucho más sus planteamientos heréticos que sus teorías astronómicas. Giordano afirmaba que Cristo no era Dios, negaba la virginidad de María, la existencia del infierno, el concepto de Trinidad  y la transubstanciación. Llegados a este punto es conveniente recordar que la vida espiritual de Giordano Bruno fue, cuando menos, convulsa. En 1565 entró en el convento dominico San Domenico Maggiore de Nápoles y, a los pocos años, ya fue considerado como sospechoso de herejía. Años depués de abandonar la orden de los dominicos, se acercó al calvinismo, del cual también se alejó años más tarde.

3.- Curiosamente, ninguno de los dos planteamientos que Giordano Bruno recoge en su obra de 1584 "De l'infitnito, universo e mondi" son originales suyos.

• La idea de que el universo podía ser infinito ya fue planteado años antes por Thomas Digges quien, a través de los valores de paralaje, dio un límite inferior del valor de la distancia a la supernova de Tycho Brahe concluyendo que debía estar mucho más alla de la órbita de la Luna.

• La posible existencia de otros mundos ya fue abordada en el siglo XIII por todo un Doctor de la Iglesia como San Alberto Magno y defendida siglos más tarde por Nicolás de Cusa [2], quizás el teólogo alemán más importante en la transición entre la Edad Media y el Renacimiento y una importante fuente de inspiración para Giordano Bruno.

• Asimismo, es necesario indicar que el argumento recogido en alguna de las obras de Giordano acerca de que la enseñanza de la Biblia debe ceñirse al plano teológico y no invadir el ámbito científico ya fue planteada en el siglo IV por San Agustín en su obra "De Geneis ad litteram".

4.- ¿Quiere lo anterior decir que la pena capital que sufrió Giordano Bruno fue justa? Con la mentalidad del siglo XXI, obviamente no. Pero es un error releer la historia con los ojos del siglo XXI. Por poner un par de ejemplos, la esclavitud era legal en algunos países anglosajones hasta hace poco más de un siglo y el matrimonio entre miembros de distinta raza estuvo prohibido en ciertos estados de Estados Unidos hasta hace poco más de 50 años. Incluso la eugenesia social estuvo bien vista a principios del siglo XX. Son ejemplos que nos escandalizan hoy en día pero que eran aceptados por la gran mayoría de la sociedad en su momento. Y situaciones actuales como la ley del aborto, basada en pura ideología y sin ninguna base científica, probablemente escandalicen a las generaciones venideras.

Me gustaría terminar recordando una vez más que la clave para una relación armoniosa entre ciencia y fe es el respeto mutuo a los respectivos ámbitos de saber y metodologías y un diálogo sincero en aquellos temas de interés común. Tal y como indicaba San Juan Pablo II, "la ciencia libra a la religión del error y la superstición mientras que la religión libra a la ciencia de idolatrías y falsos absolutos". [3]


                                             Giordano Bruno (fuente: wikipedia)